Las auditorías o análisis web, son comunes en la implementación de SEO (Search Engine Optimization)*, sin embargo, suelen dejarse de lado debido al esfuerzo que requieren. Por esta razón veremos de qué se tratan en profundidad y la importancia que tienen para el posicionamiento web.
Estas auditorías web son análisis e investigaciones en profundidad que se realizan sobre cada elemento de una página web para diagnosticar la efectividad del SEO, la utilidad y la arquitectura de la información presente, con el fin de lograr un diagnóstico que detalle las fortalezas y debilidades de la página, lo cual deriva en recomendaciones para un plan de acción renovado que mejore todos los aspectos del sitio relacionados con el posicionamiento de páginas web.
Lo primero que hay que hacer al realizar un análisis SEO es revisar el sitio para identificar cómo funciona cada elemento, luego se clasifican en categorías para realizar un diagnóstico claro y ordenado. Ejemplos de las principales categorías son: Accesibilidad, integridad del contenido, enlaces internos del sitio, elementos de navegación, arquitectura del sitio y desempeño del sitio, entre muchas otras.
Esta clasificación básica de los distintos elementos de un sitio web puede variar dependiendo de las guías que estemos usando para realizar la auditoría web o de la propia intuición del auditor.
Sea cual sea la clasificación de elementos a analizar, es importante definir qué debemos buscar, por lo que es bueno considerar los siguientes factores en la puesta en marcha de la auditoría:
- Contenido. Habrá que cuestionarse si existe contenido de calidad que pueda ser considerado un buen aporte a la red y al usuario. Este debe ser claro y actualizado. Debe presentarse de diferentes maneras e, idealmente, debería contener enlaces o links que lo den a conocer en la web.
- Consistencia y estructura de la URL (Nombre Página Web). Determinar si las diferentes direcciones (URL) de las páginas son breves y amigables y si están bien estructuradas. Esto es de suma importancia para que sean fáciles de recordar por los usuarios y fáciles de leer y compartir en la red.
- Arquitectura y navegación del sitio. La arquitectura del sitio hace referencia a cómo están organizadas las diferentes páginas y secciones del mismo, y cómo están entrelazadas unas a otras. Esto permitirá optimizar la forma en que se presenta la información y multimedia en general y con ello la navegación del usuario en el sitio, aumentando así la permanencia de las visitas recibidas.
- Flujo interno del sitio. No todas las páginas y secciones del sitio obtienen las mismas visitas, tráfico y clics por parte de los usuarios, por lo que determinar qué secciones son más populares, qué URLs son las más sólidas dentro del sitio y qué tan consistentes son todos los enlaces internos del mismo, será de suma importancia para generar futuras mejoras de SEO.
- Desempeño del sitio. Finalmente, saber qué tan rápido y consistente es el sitio, así como qué tan útil, fácil y entretenido es para el usuario, nos dará una idea de qué tan bien encaminada está la página web.
Una buena auditoría web para SEO debe contener un informe escrito de los problemas encontrados en el sitio, así como también sus causas y el plan de acción que se sugiere para solucionar dichos problemas de manera clara y precisa.
Los análisis SEO permitirán que se identifiquen las debilidades y las fortalezas de un sitio. De esta forma se podrán hacer los cambios pertinentes para corregir y fortalecer, y así obtener mejores resultados.
